En Estados Unidos no hay restricciones al respecto. Los inmuebles (comerciales o residenciales) pueden ser adquiridos por extranjeros y personas jurídicas independientemente de su estatus.

No hay impuestos ni tasas adicionales cuando los extranjeros compran una vivienda en Florida. Todas las transacciones inmobiliarias están reguladas por la ley de la misma manera que para los ciudadanos estadounidenses

En Florida no hay impuestos adicionales sobre la propiedad para los no residentes, pero existe un impuesto especial sobre la propiedad que se aplica a todos los propietarios y que debe pagarse puntualmente.

Este tipo de impuesto se recauda una vez al año, en noviembre. El importe se publica en el sitio web oficial de la oficina fiscal del condado. Por término medio, el impuesto puede estar entre el 1% y 2% del valor catastral del inmueble.

La ley estatal divide los costes de la compra o venta de bienes inmuebles en Florida de la siguiente manera: todos los gastos previos a la venta, incluido el pago de los impuestos sobre la propiedad y las ventas de bienes inmuebles, las facturas de servicios públicos y los pagos de préstamos, el coste del registro catastral, pagado por el vendedor.

El comprador, por su parte, se hace cargo de todos los gastos posteriores a la transacción: la tramitación legal de la operación, la tramitación del préstamo más la tasa de inscripción en los registros del condado. Si usted compra una propiedad en Florida por un no residente del país por dinero en efectivo (cash), el precio de registro de la transacción será de alrededor de $ 500 (dependiendo del tipo de propiedad y la época del año)